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Proponen enviar una flota de nanonaves a 300 asteroides


Recreación artística de la nanonave - FMI

50 minúsculas sondas impulsadas por velas de viento solar tardarían tres años en alcanzar el cinturón de asteroides y regresar a la Tierra con los datos

Investigadores finlandeses han propuesto enviar una flota de minúsculas naves espaciales a más de 300 asteroides en un viaje de poco más de tres años. La flota, a la que han denominado «Asteroid Touring Nanosat Fleet», comprende 50 sondas impulsadas por innovadoras velas de viento solar (llamadas velas E) y equipadas con instrumentos para tomar imágenes y recoger información sobre la composición de las rocas. Cada nanosat visitaría seis o siete objetivos antes de regresar a la Tierra para entregar los datos.

«Los asteroides son muy diversos y, hasta la fecha, sólo hemos visto un pequeño número a corta distancia. Para entenderlos mejor, necesitamos estudiar un gran número in situ. La única manera de hacerlo es usar pequeñas naves espaciales», dice Pekka Janhunen, del Instituto Meteorológico de Finlandia, quien ha presentado la idea en el Congreso Europeo de Ciencia Planetaria (EPSC) en Riga, Letonia.

En el escenario de la misión, los nanosatélites sobrevuelan sus asteroides objetivo en un rango de alrededor de 1.000 kilómetros. Cada artefacto lleva un telescopio de 4 centímetros capaz de observar la superficie de las rocas con una resolución de al menos 100 metros. Un espectrómetro infrarrojo analiza las firmas espectrales en la luz reflejada o emitida por el asteroide para determinar su mineralogía.

«Los nanosatélites podrían reunir una gran cantidad de información sobre los asteroides que encuentren durante su recorrido, incluyendo el tamaño y la forma en general, si hay polvo o cráteres en la superficie, si tienen lunas, si son cuerpos primitivos o una pila de escombros... También reunirán datos sobre la composición química de las formaciones superficiales, como la presencia de una firma espectral del agua», explica Janhunen en un comunicado.

Trayectoria de la misión de 3,2 años- Janhunen et al

Las velas E hacen uso del viento solar -una corriente de partículas eléctricas cargadas emitidas por el Sol- para generar una propulsión eficiente sin necesidad de propulsor. El empuje es generado por la rotación lenta de una correa, unida en un extremo a una nave principal que lleva un emisor de electrones y una fuente de alto voltaje, y en el otro a una pequeña unidad remota. La cuerda giratoria completa una rotación en unos 50 minutos, trazando un cono ancho y poco profundo alrededor de un centro de masa cercano a la nave espacial principal. Alterando su orientación en relación con el viento solar, el nanosat puede cambiar el empuje y la dirección.

Vuelo sobre la Tierra
El empuje generado por las velas E es pequeño; una nave espacial de 5 kilogramos con una correa de 20 kilómetros daría una aceleración de 1 milímetro por segundo en la distancia de la Tierra del Sol. Sin embargo, los cálculos muestran que, además del impulso inicial desde el lanzamiento, esto es suficiente para que la nave espacial complete un recorrido por el cinturón de asteroides y dé vuelta a la Tierra en 3,2 años. Los nanosatélites no tienen la capacidad de una antena grande, por lo que el concepto incluye el sobrevuelo final de la Tierra para descargar los datos. La misión global costaría unos 60 millones de euros, incluido el lanzamiento, con un coste de unos 200.000 euros por cada asteroide visitado.

«El coste de una misión convencional y de vanguardia para visitar este número de asteroides podría llegar a miles de millones. Este tipo de misión, utilizando una flota de nanosats y una propulsión innovadora, reduciría el coste a apenas algunos cientos de miles euros por asteroide. Sin embargo, el valor de la ciencia reunida sería inmenso», concluye Janhunen.

FUENTE: ABC.ES

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