Kepler-78b, situado a unos 700 años luz, tiene similitudes con nuestro mundo, pero orbita su estrella tan cerca -sus días duran tan solo unas pocas horas- que, en realidad, es un auténtico infierno Un equipo de astrónomos ha descubierto fuera del Sistema Solar, a unos 700 años luz en la constelación del Cisne, el primer planeta del tamaño de la Tierra que tiene una composición rocosa, como la de nuestro mundo. No solo eso, sino que además posee una masa muy similar. Pero hasta aquí llegan las similitudes, porque este exoplaneta, llamado Kepler-78b, orbita una estrella similar al Sol tan cerca -un día dura muy poco, el tiempo de una jornada laboral, apenas 8,5 horas-, que es demasiado caliente como para albergar vida. Los resultados se publican en dos estudios independientes en la revista Nature, dirigidos por científicos de la Universidad de Hawaii en Manoa, Honolulu, y la Universidad de Ginebra en Suiza. Este nuevo mundo fue descubierto por el telescopio espacial Kepler de la NAS...